domingo, 29 de diciembre de 2013

¿Y qué pasaría si nunca te hubiese conocido?

 Quizás, si no te hubiese conocido, hoy no estaría tan perdida entre las miradas de la gente. Fuiste y eres mi peor error, pero la primera vez que te vi a los ojos, cuando sonreíste, ¿fuí yo la única que sentí algo?Perdona, ya estoy desvariando. Supongo que tus ojos verdes causan ese efecto en mí, pensé que sería bonito, pero ya ves, siete meses después y sigo como en el principio. Sin absolutamente nada.
Y bah, te acostumbras a la sensación de inferioridad, de querer y no poder. Pero, ¿a quien quiero engañar?¿Amor, de verdad?Sólo hay lágrimas, sólo hay dolor, y no, no hay amor.
Y perdón. Perdón por quererte como no debo, perdón por creerme las mentiras de la gente, perdón por soñar, no sé, supongo que perdón por ser persona, por sentir, por cometer errores y por ser yo. Porque sé como puedo llegar a ser, pero no te preocupes, que hoy se acaba mi cuento de hadas. Porque, si llegue a soñar cursilerías de que era una princesa en buscan de alguien, me confundí de príncipe. No me cansaré de pedirte perdón, de que atrás quedan todas esas cartas que te escribí día a día, de que atrás quedan mis sueños y sonrisas por las que tu eras el culpable.
Ya está, ya se acabaron mis lágrimas por ti. Creo.
Porque sé, que al fin y al cabo, volverás a sonreirme y volveré a caer a tus pies, como siempre.  Pero aquella chica que hubiese movido montañas solo para verte sonreír, se fue. Porque aun que lo sienta no lo demostraré, o al menos, no como antes, si al fin me he dado cuenta de que no merecías ninguna hora que perdí pensando en ti, ni tampoco todas las lágrimas que mis ojos soltaron. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario